Empecemos con tu experiencia laboral, ¿Cómo has llegado al fintech?
Mi primera experiencia laboral fue en BBVA y desde entonces siempre he tenido cierta atracción por el Sector Financiero. Es un mundo con el que nunca he dejado de tener contacto de una u otra forma mientras trabajaba en otros proyectos digitales.
El paso definitivo lo di en 2009 con el lanzamiento de iahorro.com. Fue un proyecto muy bonito que nació para tratar de solucionar los problemas e inquietudes del consumidor al contratar productos bancarios de todo tipo, desde una hipoteca hasta una simple cuenta bancaria.
Una de las características de la banca es que sus productos son poco claros y poco transparentes. A esto se suma la falta de cultura financiera general en España con crecientes asimetrías en conocimiento a favor de la banca. Esto se traducía en claras ineficiencias que desde Iahorro tratamos de solucionar, también como una suerte de servicio de atención al usuario bancario español.
A partir de ahí he tenido la oportunidad de participar en otros proyectos fintech como TheCrowdAngel, una de las primeras empresas de equity crowfunding y de seguir adentrándome en el espacio de fintech
Fruto de esa especialización ayudé a crear la Asociación Española de Fintecth e Insurtech (AEFI) con el objetivo de democratizar el uso de las fintech en la Sociedad y defender el sector, así como de actuar como una voz integrada ante las administraciones públicas, reguladores y supervisores.
Cuéntanos ¿cómo surgió la idea de lanzar Ritmo?
Como emprendedores en serie de proyectos digitales que somos los socios fundadores de Ritmo, nos hemos enfrentado con dificultades al financiar el crecimiento de nuestras empresas.
Hemos desarrollado proyectos con buenas métricas y crecimientos saludables, que tuvieron dificultades para crecer porque no logramos la financiación necesaria. Por eso decidimos lanzar Ritmo, para ayudar a los negocios digitales a crecer. Ritmo está creado por emprendedores, para emprendedores.
Los tres socios fundadores somos emprendedores y nos hemos visto en las mismas circunstancias o similares. La dificultad para acceder a la financiación bancaria y la necesidad de tener que convencer a venture capital o business angels del proyecto más allá de lo que dijesen las métricas y datos del negocio.
Con Ritmo queremos ofrecer un modelo diferente y ayudar al emprendedor a crecer como nos gustaría que nos hubiesen ayudado a nosotros, con una financiación basada en los datos de la empresa.
El modelo de financiación de Ritmo es rápido, flexible y 100% amigable para la empresas y el emprendedor.
Su funcionamiento es muy sencillo, ayudamos a las empresas a crecer con financiación a cambio de un porcentaje de sus ventas futuras hasta que terminen de devolver el dinero adelantado. Nos adaptamos siempre al ritmo de la start up.
Para tomar la decisión analizamos las principales métricas de la empresa, sus datos de marketing y ventas a través de sus plataformas digitales. Introducimos estos datos en nuestro sistema de inteligencia artificial, que nos genera una predicción de los ingresos futuros. En función del resultado de nuestro análisis, en menos de 24 horas preaprobamos el proyecto y nos ponemos en marcha para hacerle llegar la financiación. Fácil, sencillo y 100% basado en datos.
¿Qué potencial de crecimiento tiene Ritmo considerando las tendencias fintech?
La pandemia ha creado un caldo de cultivo idóneo para que surjan fórmulas de financiación alternativa como la nuestra. Por un lado, el ecommerce y las empresas online se han disparado en número y facturación en esta nueva “Stay at home Economy”. Por otro lado, las fuentes de financiación de crecimiento tradicionales como el venture capital se han vuelto más conservadores.
Esto deja a las empresas que más están creciendo con la crisis en busca de alternativas de financiación para seguir creciendo y hacerlo más rápido. Ritmo cubre esa necesidad para las empresas online que tengan una trayectoria positiva, con ingresos predecibles o recurrentes. Empresas de ecommerce, SAAS, plataformas digitales, y otros negocios digitales con consistencia en sus ingresos y métricas.
Sólo en lo que llevamos de 2021 hemos financiado más de tres millones de euros a comercios online y esperamos superar los 15 millones para todo el ejercicio. Nuestro objetivo es ayudar a más de 1.000 ecommerce en España a escalar y crecer en los próximos años.
Según tu experiencia ¿Cuáles son los ingredientes para crear un fintech de éxito?
En mi experiencia hay cuatro pilares clave para crear una fintech, aunque en realidad se pueden aplicar a cualquier empresa.
- Entender bien cuál es tu misión, saber qué ofreces y qué buscas. Si no tienes claro este punto es muy fácil perderse. En nuestro caso, la misión es clara: ayudar a los emprendedores a crecer.
- Rodearte del mejor equipo, porque al final una empresa llega siempre hasta donde le lleva su equipo humano.
- Contar con respaldo financiero de profesionales e instituciones que entiendan la industria en la que te mueves, especialmente en un entorno tan cambiante como el fintech.
- Generar confianza, porque al final no dejas de estar ofreciendo una solución innovadora dentro de un área tan tradicional y delicada como las finanzas.. Sin esa confianza es imposible salir adelante.
Y, por último, como con cualquier start up, seguir la máxima de “ejecución, ejecución, y ejecución” porque de nada sirve levantar un castillo en el aire.
¿Cuál crees que es el desafío más grande en los próximos años para el ecosistema fintech español?
El gran reto del ecosistema va a ser generar confianza, tanto en inversores como en consumidores.
Otro de los retos es que las iniciativas que surgen en el ámbito fintech terminen llegando a los consumidores en un país tan bancarizado como España. Por fortuna, las nuevas generaciones están cada vez más alejadas de la banca tradicional y son más receptivas a los nuevos modelos financieros.
El desarrollo de una cultura financiera es otro de los desafíos, no solo para las personas, sino para las empresas y específicamente para los emprendedores digitales.
España como país necesita un mayor desarrollo real de la innovación financiera, en lugar de importar modelos y empresas internacionales.
El Sandbox financiero que se aprobó en octubre de 2020 puede ser un gran impulso para todos los proyectos del sector y una fórmula para acelerar su aprobación e implantación.
Te hacemos una última pregunta para que pueda ser de ayuda a la comunidad de FT, ¿qué piensas que podría ser mejor para un joven, empezar en el mundo laboral con una start-up con fuerte capacidad de innovación o con una big corporation?
En mi opinión, más importante que el tipo de empresa en el que se empieza es la cultura de la empresa y, sobre todo, contar con un buen jefe. Para mi esa es la clave en los comienzos de la carrera profesional, estar a cargo de una persona que sea íntegra, profesional, exigente, que practique el refuerzo positivo y sea optimista.
Dicho esto, creo que una big corporation no es el mejor lugar para dar tus primeros pasos laborales, pero sí quizás una consultora, que aporta método, enseña esfuerzo y provee diversos proyectos para el aprendizaje; o en una start-up, que enseña a buscarse la vida a uno desde el principio, a trabajar en entornos cambiantes e innovadores. En definitiva, las startups de hoy serán los grandes generadores de empleo de mañana.